Frases y Diálogos de la película "Turning Red". Directora: Domee Shi, Guion: Domee Shi, Julia Cho. Historia: Domee Shi, Julia Cho, Sarah Streicher, Música: Ludwig Göransson. Canciones: Billie Eilish, Finneas O'Connell, Fotografía: Animación, Mahyar Abousaeedi, Jonathan Pytko.
Reseña A.S.B. : Si bien en algunas de las últimas películas de Disney/Pixar critiqué la forzada identidad cultural que querían sellar en cada producción, acá en "Turning Red" nuevamente se usa, para mostrar aspectos de la cultura asiática en una familia de inmigrantes que viven en Canadá. Pero acá no me parecieron forzadas las referencias sino muy naturales, proporcionadas y muy astutamente utilizadas. La película me ha gustado mucho porque de muchas maneras contiene muchos aspectos que hasta ahora eran omitidos o esquivados sutilmente por las películas de animación de esta productora. Por eso me da un poco de pena que no se vea en cines, pero ojalá a través de la plataforma de Disney tenga mucha difusión, y muchos padres o adultos la vean con los más pequeños. Las referencias están muy bien elegidas, porque veo algo de Mulán, Brave, Monsters Inc (quizás), y la evidente referencia al cine de animación asiático, en donde siempre se ha tratado libremente esta transición a la etapa adulta a través de lo fantástico; y además la referencia actual al presentar una boy band, estilo de la famosa banda de K-Pop, BTS. Entre otras más, porque son referencias muy bien utilizadas para dibujar el profundo planteamiento de trasfondo.
La película cuenta la historia de Mei Lee, una niña de 13 años que atraviesa por muchos cambios, y se debate entre seguir siendo la hija modelo y obediente, o en experimentar libremente las emociones que trae la adolescencia. De fondo hay un tema fantástico y ancestral, y es que las mujeres de familia al llegar a la pubertad, deben enfrentarse a la conversión en un panda gigante rojo cada vez que se dejan consumir por las emociones fuertes. Y ese es uno de los puntos fascinantes de la historia, en cómo a través de un tema fantástico abordan de forma inteligente y abierta los cambios físicos y emocionales que pasan las niñas en esa etapa en que su cuerpo y mente sufren tantas transformaciones. La directora es una mujer, y creo que es la primera mujer en dirigir una película de Pixar. En la parte de su guión, me parece una historia muy bien estructurada y planteada. Esa constante y enorme metáfora que convive en la historia y en un personaje, permite abordar temas que jamás se habían tocado en esta productora, y sin temor de expresar el natural deseo sexual de las niñas (en esta ocasión) en esa etapa de la vida, entre otras emociones profundas. Y aquí me gusta que hayan incluido lo de la boy band, porque precisamente para la juventud, estas bandas representan una fijación y parte de un ritual de la adolescencia para experimentar e idealizar su deseo. Y preciso lo he experimentado el día de hoy que asistí al concierto virtual trasmitido en salas de cine de la banda BTS desde Seúl, Corea. La sala estaba llena, y a mis lados habían dos grupos de adolescentes, quienes expresaban libremente lo que les generaban cada uno de los chicos de la banda, cada vez que aparecían en pantalla. Y me pareció genial. Creo que no se cohibieron ante mí, porque con mi tapabocas y mi cabello largo, habré pasado por otra chica, o simplemente no les importaba lo más mínimo. Pero al ver la película me hizo recordar mucho ese momento.
Por todo esto, me parece que la película es muy buena, y un paso de Pixar nuevamente a las historias de calidad (y acá con nuevos temas), y con menos fórmulas y estructura de guías turísticas. Se tratan además otros temas, como la influencia de la madre en la vida de las hijas, la aceptación, la amistad, entre muchos otros temas. Al final no sé si se pierde un poco de fuerza, porque no llegué a conmoverme, como normalmente me ha pasado siempre con las mejores películas de Pixar. Así que hubo alguna desconexión emocional, o quizás por no seguir viejas estructuras, necesariamente no generó las mismas emociones. Pero me ha gustado mucho, y me parece un argumento muy serio, importante y muy bien tratado para toda la familia. No dejen de verla.
(Amigas y Meilin Lee)
- Mei, ¿qué diablos pasó?
- Es solo una cosa genética... inconveniente que heredé de mi mamá. Quiero decir... se irá. Con el tiempo. Quizá.
(Amigas y Meilin Lee)
- Oh, Mei.
- ¡Odio esto! Estoy desaliñada, apesto. Mi mamá ni siquiera me mira... ¿y ahora 4-Town? ¿Cuándo vendrán?
- El 18 de mayo. Acaban de anunciarlo.
- ¿El 18? No hay forma de que esto se vaya para esa fecha. Vayan. Vayan a convertirse en mujeres sin mí.
- Mei. Va a estar bien.
- No, no estará bien. Soy un fenómeno. Déjenme en paz.
(Amigas y Meilin Lee)
- Gracias, chicas. Son de lo mejor.
- Te queremos, Mei.
- Eres nuestra amiga.
- Sí. Pase lo que pase. Con o sin panda.
(Amigas y Meilin Lee)
- ¡Mei! ¡Tú eres tú! ¡Y te ves increíble!
- El rojo te queda muy bien.
(Volviendo a su forma humana luego del abrazo grupal)
- ¿Se fue?
- Por ahora. Pero si me emociono demasiado, volverá enseguida...
- Abby, ¿qué diablos? Siento algo diferente. Abby, golpéame. Oh, ¡Dios mío! Conservé la calma. Hay algo en ustedes, chicas, que neutraliza a la panda.
- Es nuestro cariño.
- Somos como una manta cálida y mullida.
- Sí.
(Amigas y Meilin Lee)
- No. Aún mejor. ¡Puedes venir con nosotras a ver a 4-Town!
- ¡Sí! Podría ser nuestra única chance de verlos juntas.
- Les pediremos permiso a nuestros padres esta noche.
- Haremos valer nuestra opinión. Sí. ¿Vendrás o no?
- Pero no puedo pedirle permiso a mi mamá. Soy una bomba de tiempo peluda.
- ¡De genialidad!
- ¡Y ahora puedes controlarla!
- ¡Así que demuéstraselo y te dejará ir!
(Amigas y Meilin Lee)
- Mei, ¿y si no hicieras el ritual? ¿Y si te quedaras con la panda?
- ¿Qué?
- ¡Mírate! No eres la amante de la limpieza, con todos 10, santurrona... Con quien jamás nos reunimos.
- Sí.
- Eres muy rebelde ahora.
- Chicas, no puedo seguir así para siempre. Toda mi familia enloquecería. Especialmente mi mamá. Todas sus esperanzas y sueños están puestos en mí.
- Lo sé. Pero realmente cambiaste... y estoy orgullosa de ti. No te deshagas de todo eso.
- Sí. Si no fuera por ti, nada de esto estaría sucediendo.
- ¡Eres una gran persona!
Abuela: Mei-Mei, sé lo que haces. Sé lo difícil que es mantener adentro a la bestia. Se siente bien dejarla salir. Tan libre. Pero cada vez que lo haces, se fortalece. Y entonces, estarás atada a ella para siempre y el ritual fracasará.
Meilin Lee: ¿Ocurrió alguna vez?
Abuela: No puede ocurrir. Tu madre y yo éramos muy unidas en una época... pero la panda roja acabó con eso. No podría soportar que te pasara lo mismo. Así que basta de ser panda. Eres lo más importante para tu madre, Mei-Mei. Sé que harás lo correcto.
Meilin Lee: ¿La regla número uno en mi familia? Honra a tus padres. Son los seres supremos que te dieron la vida... que trabajaron duro y se sacrificaron para darte un techo... poner comida en tu plato... una enorme cantidad de comida. Lo mínimo que puedes hacer a cambio es... todo lo que te pidan. Por supuesto que algunos dicen: "Ten cuidado. Honrar a tus padres suena genial, pero si lo llevas demasiado lejos... puedes olvidarte de honrarte a ti misma". Por suerte, no tengo ese problema. Soy Meilin Lee. Y desde que cumplí 13 años, he hecho lo que me interesa. He tomado mis decisiones las 24 horas del día, los 365 días del año. Visto como quiero, digo lo que quiero... y no dudaré en hacer una voltereta espontánea si tengo ganas.
Meilin Lee: Perdón. Sé lo que parece. No soy propiedad de nadie. Pero eso no significa que haga lo que quiera. Como la mayoría de los adultos, tengo responsabilidades. No todo tiene que ver conmigo. Tomo mis propias decisiones, es solo que... algunas de mis decisiones también son las de ella (la madre).
Ming: Nuestra antepasada, Sun Yee, tenía una conexión mística con los pandas rojos. De hecho, ella los quería tanto... que les pidió a los dioses que la convirtieran en una panda. Eran tiempos de guerra. Todos los hombres se habían ido. Sun Yee se desesperaba por hallar la forma de protegerse a ella y a sus hijas. Y una noche, durante una luna de sangre, los dioses le concedieron su deseo. Le dieron la habilidad de aprovechar sus emociones... para transformarse en una poderosa bestia mística. Pudo rechazar a los bandidos, proteger su aldea... y salvar a su familia de la ruina. Sun Yee les pasó este don a sus hijas, para cuando fueran adultas. Y ellas se lo pasaron a sus hijas. Pero con el tiempo, nuestra familia eligió venir a un nuevo mundo. Y lo que era una bendición se volvió... un inconveniente.
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