Frases y Diálogos de la película "The Wife" (La Esposa). Director: Björn Runge, Guion: Jane Anderson (Novela: Meg Wolitzer), Música: Jocelyn Pook, Fotografía: Ulf Brantas. La estaba esperando especialmente por el favoritismo que ha tomada la gran actriz, Glenn Close, como fuerte candidata a la próxima temporada de premios en la categoría de Mejor Actriz. Y después de verla, vaya que reconozco su labor y su muy posible candidatura. Glenn Close interpreta a Joan Castleman, una buena esposa que ha compartido su vida y muchas cosas más con su marido, el escritor Joe Castleman (Jonathan Pryce), quien ha sido anunciado como el ganador del Premio Nobel de Literatura. La película es basada en una novela, y tiene buen ritmo, pero lo mejor y por lo que vale la pena verla es por la excelente actuación de Glenn Close, como la buena esposa con un gran secreto. Close siempre ha sido una gran actriz, en el pasado injustamente encasillada en los papeles de mujer fatal y mala, son pocos los que le han permitido mostrar su sensibilidad en pantalla, pero cada vez que puede borda cualquier papel, y acá da un recital interpretativo de primera clase. Y sería muy merecido que ganara finalmente el Oscar que se le ha negado. Su personaje simboliza a un gran grupo de mujeres del pasado (y no tan lejano) que se refugiaron tras una figura masculina con más oportunidades, y que no llegaron a explotar y dar a conocer su talento. Atención a los matices, los detalles y las miradas.
Organizador: James Finch ha obtenido nuestro premio de Física. Él es muy talentoso y amable. James Finch, permítame presentarle al novelista Joseph Castleman.
James: Un placer conocerlo, Joseph. Desearía poder decir que he leído todos tus libros.
Joe: Bueno, yo desearía poder decir que he entendido todas sus fórmulas.
Constance: He leído sus libros. Y le aseguro que son mucho más interesantes que los garabatos de James.
James: Mi esposa, Constance, también es científica. Como ven, es bastante crítica de mi trabajo.
Joe: Mi esposa no escribe, gracias a Dios. Si no sufriría un permanente bloqueo de escritor.
Joan: Hola, mi nombre es Joan.
Joe: Joan es el amor de mi vida.
Joan: David... Quería decirte que... tu padre me ha mostrado tu cuento.
David: ¿Sí...?
Joan: Creo que está increíblemente bien escrito.
David: ¿Y qué dijo él?
Joan: No lo hemos hablado todavía.
Joe: Hoy, soy el más feliz de los hombres. Estoy sano, tomando en cuenta algunas operaciones de bypass. Los tengo a ustedes, mis maravillosos amigos, mis estudiantes siempre curiosos. Mi hijo, David, mi hermosa hija, Susannah... y un próximo nieto. Quien, en este instante, flota felizmente en el líquido amniótico de su madre. Y finalmente... Finalmente, tengo a mi bella esposa Joan. El amor de mi vida. Joan, ven aquí. El amor de mi vida. Sin esta mujer... no soy nada. En realidad, mi mayor logro es haberla convencido de que se casara conmigo.
Joan: Hal, haz que se detenga.
Hal: Por Joseph Castleman, que en mi opinión es el mejor autor vivo del siglo XX.
(Discusión con el periodista Nathaniel)
Joe: ¡Qué pesado!
Joan: Fuiste grosero.
Joe: Tuve que serlo, de lo contrario nunca se habría dado por vencido.
Joan: No debes hacer un enemigo de alguien así. Nada es más peligroso que un escritor herido.
(Llegando a la suite del hotel de los ganadores del Nobel)
Joe: "¡Disfruten, disfruten!", de Sylvia Fry… ¿Quién demonios es Sylvia Fry?
David: Es uno de tus personajes. ¡Por Dios, papá!
Joan: No seas duro con él, David. Está cansado.
Joe: Mi memoria está fallando un poco. También te pasará a ti. Antes, quizá, si fumas.
Joe (Joven): Un verdadero escritor no escribe para ser publicado. Escribe porque tiene algo urgente y personal que necesita decir. Un escritor tiene que escribir, al igual que tiene que respirar... y continúa haciéndolo. A pesar de la soledad, a pesar de la pobreza, a pesar de las pilas de cartas de rechazo. A pesar del padre o la esposa que dicen: "¡Consigue un trabajo de verdad!" Un escritor escribe, porque si no lo hace su alma morirá de hambre… "Su alma se desmayó lentamente cuando escuchó la nieve caer débilmente a través del universo y caer débilmente, como el descenso de su último final sobre todos los vivos y los muertos". James Joyce.
Joan: No es fácil ser tu hijo.
Joe: ¡Oh, vamos! No es fácil ser hijo de nadie.
Joan: Podrías mostrarte un poco más orgulloso de él.
Joe: O él podría trabajar un poco más duro. No le haríamos ningún favor diciéndole que es brillante.
Joan: Creo que tiene talento.
Joe: Deberías decírselo.
Joan: No significa nada viniendo de mí. Debe oírlo de ti.
Joe: Él no debería necesitar mi aprobación para escribir.
Joan: Todo el mundo necesita aprobación, Joe.
Joan: Joe, por favor no me agradezcas en tu discurso.
Joe: ¿Cómo?
Joan: No quiero aparecer como la esposa sufriente. Lo entiendes, ¿verdad?
Joe: No, no. Tengo que agradecerte. Todos agradecen a su esposa. Si no lo hago quedaré como un cerdo narcisista.
Joan: ¡Lo eres!
Joe: Lo haré rápido, Joanie. Una frase. Será indoloro. Vamos...
Joan: No. No.
Joe (Joven): Joan, ella es Elaine Mozell.
Joan (Joven): Hola. Su prosa es brillante. Es pura, vibrante y audaz.
Elaine: Gracias. ¿Pero sabes qué? El público no tolera prosa audaz de una mujer. Tienes talento, me han dicho.
Joan: Gracias. Me encanta escribir, es mi vida.
Elaine: No lo hagas.
Joan: ¿Discúlpeme?
Elaine: ¿Quieres saber dónde terminarán tus libros? Justo allí. En los estantes de los alumnos… Adelante, ábrelo. ¿Has oído eso? Ese es el sonido de un libro que nunca ha sido abierto. Nunca pienses que puedes llamar su atención.
Joan: ¿La de quién?
Elaine: La de los hombres. Quienes escriben las reseñas, quienes dirigen las empresas editoras, quienes publican las revistas. Los que deciden quién debe ser tomado seriamente y puesto en un pedestal por el resto de su vida.
Joan: Un escritor tiene que escribir.
Elaine: Un escritor tiene que ser leído, cariño.
Nathaniel: He leído algunos de los primeros trabajos de Joe. Unos cuantos cuentos cortos que encontré... en unas bastante desconocidas revistas literarias y... lamento decirlo, Joan, pero no eran del todo buenos.
Joan: Los primeros trabajos son raramente legibles. Deberías saberlo.
Nathaniel: Sí, pero no hay el menor rastro de su voz madura. De hecho, tu obra, "La esposa del profesor" se parece ser mucho más al Castleman temprano que sus trabajos.
Joan: Es totalmente comprensible. Joe dejó en mí una gran huella como profesor.
Nathaniel: Parece razonable. Cuando hablé con Carol, ella dijo que fue muy extraño cuánto mejoró su escritura luego de haberte conocido.
Joan: Es muy generoso de su parte.
Nathaniel: Con el debido respeto... creo que estás harta de Joe Castleman. Creo que estás cansada de sus aventuras, cansada de ser invisible. Cansada de usar tu enorme talento para crear la leyenda Castleman. Por el bien de tu familia, por la felicidad de tu familia, no deberías estar haciendo esto. David parece un joven muy infeliz.
Joan: No eres quién para estar hablando de mis hijos.
Nathaniel: Tienes razón. Lo siento. Pero creo que deberías hablar con alguien. Te doy mi palabra, nunca revelaré mi fuente. Yo seré el hombre malo, así no sientes que estás traicionando a Joe. Entonces se sabrá la verdad, y serás libre de escribir con tu nombre.
Joan: Qué increíble historia, Nathaniel. Deberías escribir ficción.
Joan (Joven): Tus personajes son de madera, Joe. Sin ofender, pero no los has hecho reales.
Joe (Joven): Eso no significa nada. Sé específica.
Joan (Joven): Para nombrar una cosa... los diálogos. Déjame ver si puedo encontrar un ejemplo.
Joe: Esto no va a funcionar.
Joan (Joven): ¿Qué?
Joe: Todo esto. Tú y yo. Nuestra historia de amor, o como quieras llamarla.
Joan (Joven): Joe, que no ame tu novela no significa que no te ame a ti.
Joe: ¿Cómo puedes amarme si piensas que soy a un escritorzuelo? ¿Cómo puedo estar con alguien que no me respeta? No tienes respeto por mí.
Joan (Joven): Yo te respeto. Te respeto en todas las formas posibles.
Joe: ¿En todas las formas posibles? ¡A la mierda con eso! ¡Di que crees en mí como escritor!
Joan (Joven): Es sólo tu primer borrador...
Joe: Joanie, nuestra relación se acabó. ¿Qué debo hacer, cuando vuelva a estar en... a enseñar inglés en una universidad mediocre, para tener sexo con una de mis alumnas?
Joan (Joven): No soy sólo una de tus alumnas, Joe.
Joe: No, eres la chica con el toque mágico. Te convertirás en un éxito literario, mientras me quedo en casa cocinando.
Joan (Joven): ¡Nunca seré un éxito literario, desgraciado, nunca! Nunca nadie publicará mis libros, y aun si lo hicieran, nadie los leería. No tengo grandes ideas como tú. Tú eres quien tiene algo que decir, no yo. Por favor, no me dejes. Si te pierdo, mi vida se acabó.
Joe: No me voy a ninguna parte.
Joan (Joven): No quiero vivir sin ti.
Joe: Y yo tampoco quiero vivir sin ti. ¡Joanie, la vida es tan injusta!
Joan (Joven): Bien, bien, bien... Ahora tranquilicémonos. Todo estará bien.
Joe: Bien... bien... ¿Qué vamos a hacer?
Joan (Joven): No lo sé. Déjame pensar...
Joe: ¿Crees que no tiene remedio? ¿La mierda que he escrito?
Joan (Joven): No es una mierda, Joe. Es una historia cautivadora. Todas las ideas están ahí. Puedo verlo. Y puedo arreglarlo. ¿Quieres que lo arregle?
Si conoces otras frases, diálogos o monólogos que destacar de la película The Wife (Björn Runge) deja tu comentario ;)
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