Frases de la película: Minari (Lee Isaac Chung) - 2020 / U.S.A

Frases y Diálogos de la película "Minari". Director: Lee Isaac Chung, Guion: Lee Isaac Chung, Música: Emile Mosseri, Fotografía: Lachlan Milne.

Reseña A.S.B.: "Minari" era una de las películas que más esperaba desde el año pasado. "Minari" es una película preciosa, minimalista, profunda y luminosa, que cuenta la historia de una pareja joven de coreanos que emigra a los Estados Unidos en busca del sueño americano. La pareja tiene dos hijos, una niña mayor y un pequeño de siete años, ambos nacidos en U.S.A. Tras pasar 10 años trabajando en identificar el sexo de los pollitos para su producción, el padre decide invertir lo ahorrado en abrir una granja en Arkansas, dedicada a cultivar vegetales coreanos para la creciente comunidad en el país. Esa es la sinopsis general. La esposa no está muy convencida de esa decisión pero apoya a su esposo y se mudan a la granja a probar suerte, a donde pronto se une un hombre religioso para ayudar a las cosechas y la abuela de los niños, que llega de Corea para ayudar a cuidarlos.

Aunque es una película de apariencia sencilla, todo lo que te muestra tiene un significado simbólico y narrativo, desde el proceso de selección de los pollos por su sexo, en donde se desechan a los machos por su nula fecundidad y mala carne, hasta el nombre de la película, Minari, que se refiere a una hierba asiática que se utiliza para condimentos en la cocina y de forma medicinal. La película muestra claramente como tema central la ilusión del sueño americano, que se manifiesta en el enfriamiento en las relaciones de los esposos, mientras que la relación de la abuela con el pequeño nieto mejora, porque al inicio la abuela no cumple con el estereotipo de abuela norteamericana, de hacer galletas y cosas así que se ven en las películas. Entonces hasta en ese detalle se ve el choque de la culturas, y otro tema importante, como es la adaptación y la vida de los inmigrantes coreanos en los Estados Unidos.

La película transcurre en los años 80 y veo algo muy original en su historia, aunque toque temas generales. Especialmente por la perspectiva desde una familia coreana. Precisamente la película es muy autobiográfica del director, quien nació en los Estados Unidos, y de padres coreanos, y quien también creció con una abuela coreana, quien fue su conexión a sus raíces. En la película los padres hablan a sus hijos en coreano y los pequeños hablan en inglés, negando esa parte de ellos. Y el director cuenta que también su padre abrió una granja que finalmente no funcionó muy bien y que terminó trabajando con plantas medicinales como el Minari, que es la planta que la abuela lleva y siembra ella misma aparte del cultivo del padre. Y es la que permanece, como gran símbolo de importancia a las raíces y al reconocimiento de la identidad. La película además tiene esa sensibilidad asiática que tanto me encanta, el ritmo pausado, una bella dirección y fotografía, y un buen trabajo del reparto. Es una pequeña joya y entre lo mejor del año pasado.

Monica: Los Coreanos viven en Rogers cerca de otras tres grandes ciudades. Si nos mudamos allí podríamos encontrar una niñera Coreana... que cuide a los niños. Hay un gran centro comercial, una buena escuela y la gente vive bien allí.

Jacob: Pero, ¿qué hay del trato que hicimos? 

Monica: Puedes trabajar aquí y yo puedo construir un jardín. Podríamos conseguir dos hectáreas de tierra en Rogers.

Jacob: Dos hectáreas es un pasatiempo. Pero mi sueño son veinte hectáreas.

Monica: ¿Esa tierra es tu sueño?

Jacob: De todos modos, no necesitamos una niñera. No hay nadie en los alrededores. ¿Qué podría suceder?

Monica: Pero, ¿y si le sucede algo? El hospital está a una hora de distancia.

David: ¿Qué es eso?

Jacob: ¿Eso? Los polluelos machos son descartados allí.

David: ¿Qué es "descartado"?

Jacob: Es una palabra difícil, ¿no? Los machos no tienen buen sabor. No pueden poner huevos y no sirven para nada. Así que, tú y yo deberíamos tratar de ser útiles. ¿De acuerdo?

Jacob: Ven aquí. Siéntate. Hijo. ¿Qué te parece nuestra granja?

David: Es bueno.

Jacob: ¿Cómo era nuestra tierra en California?

David: No teníamos nada.

Jacob: Es cierto. No teníamos nada. Pero ahora... Tenemos un gran terreno. ¿No es eso algo bueno? Entonces, dile a mamá que te gusta mucho. ¿De acuerdo? Vayamos adentro.

Jacob: Dijimos que queríamos un nuevo comienzo. Eso es todo.

Monica: Si este es el "comienzo" que querías... Tal vez no haya ninguna posibilidad para nosotros.

Monica: Papá y yo hablamos anoche. No nos mudaremos. La abuela vendrá a vivir con nosotros en vez de eso.

Anne: ¿La abuela?

Monica: Sí.

Anne: Por fin conocerá a David.

Jacob: Estadounidenses... ¡Creer en esas tonterías! David. Los Coreanos usan la cabeza. ¿De acuerdo? Usamos nuestras cabezas. Oye, ven aquí. Ven. Mira. Cuando llueva... ¿A dónde irá el agua? ¿En un lugar alto o bajo?

David: En un lugar bajo.

Jacob: Así es. De acuerdo. ¿Dónde está el lugar más bajo?

David: Allí.

Jacob: Así es. ¿En qué otro lugar?

David: ¿Allí?

Jacob: De acuerdo. Entonces, ¿qué lugar tiene mucha agua?

David: Allí.

Jacob: ¿Por qué? 

David: Porque a los árboles les gusta el agua.

Jacob: ¡Mi pequeño y astuto muchacho! David. Nunca pagues por nada que puedas encontrar gratis. Para la casa, tendremos que pagar por el agua. Pero para nuestra granja, podemos obtener agua gratis de la tierra. Así es como usamos nuestras cabezas. ¿Lo entiendes?

Anne: Oye, papá.

Jacob: ¿Sí?

Anne: ¿No es mejor cultivar vegetales estadounidenses?

Jacob: Cada año, treinta mil Coreanos emigran a los Estados Unidos. ¿No extrañarían la comida Coreana?

Anne: ¡Sí!

Jacob: Entonces, ¿cómo le iría a una granja Coreana como la nuestra? Muy bien, ¿verdad?

Anne: Sí.

David: ¿Abuela?

Abuela Soonja: ¿Sí?

David: ¿No sabes cocinar?

Abuela Soonja: No, no puedo.

David: ¿Puedes hornear galletas?

Abuela Soonja: No. ¿Tú puedes hornearlas?

David: Entonces, ¿qué puedes hacer?

Anne: Sabes, ni siquiera sabe leer. 

David: No es como una abuela de verdad.

Abuela Soonja: ¿Te agrada la abuela?

Anne: Abuela. No deberíamos estar aquí por las serpientes.

Abuela Soonja: ¿Sabes lo que es el "minari"? Traje algunas semillas de minari de Corea. Podemos plantarlas justo allí. 

David: Voy a bajar.

Abuela Soonja: El minari crecerá bien aquí.

Abuela Soonja: A ustedes dos les encantaba esta canción.

Monica: ¿Esta canción?

Abuela Soonja: ¡Claro! Cuando alguien hacía cantar a tus padres, se ponían muy cariñosos cuando cantaban esta canción.

Monica: ¿Lo hacíamos?

Abuela Soonja: Vienen a Estados Unidos y se olvidan de todo.

David: Mami... A veces, sueño que estoy orinando en el baño, pero me despierto en mi cama.

Monica: Entonces, pregúntate antes de orinar... ¿Es esto un sueño? ¡Y pellízcate así! ¿De acuerdo?

Abuela Soonja (Burlándose): Pene quebrado. Pene quebrado.

David: ¡Mamá! No se llama pene, se llama "ding-dong". "Ding-dong".

David: Abuela, no eres una abuela de verdad.

Abuela Soonja: ¿Cómo es una abuela de verdad?

David: ¡Hornean galletas! ¡No dicen groserías! ¡No usan ropa interior de hombre!

Abuela Soonja: ¿En serio?

Abuela Soonja: El minari está creciendo bien. David, nunca antes habías comido minari, ¿verdad? El minari es realmente lo mejor. Crece en cualquier lugar, como las malezas. Así que, cualquiera puede recogerlo y comérselo. Ricos o pobres, cualquiera puede disfrutarlo y sentirse saludable. El minari puede ser puesto en el Kimchi, en el guiso, en la sopa. Puede ser una medicina si estás enfermo. ¡El minari es maravilloso, es maravilloso!

David (cantando): # Maravilloso, maravilloso, Minari #

Abuela Soonja: ¡Eso es! # Maravilloso, maravilloso, Minari # ¿Es una canción sobre el minari? El viento está soplando y el minari se está moviendo. ¡Están diciendo muchas gracias!

David: ¡Abuela! Mira eso. (Le señala una serpiente en un árbol y le arroja una piedra)

Abuela Soonja: ¡Detente, David! ¡Déjalo en paz! 

David: ¡Se arrastrará y se esconderá!

Abuela Soonja: David. Es mejor verlo a que esté escondido. Las cosas que se esconden son más peligrosas y aterradoras.

Jacob: La vida era tan difícil en Corea. ¿Recuerdas lo que dijimos cuando nos casamos? Que vendríamos a Estados Unidos y nos ayudaríamos mutuamente.

Monica: Lo recuerdo.

Jacob: En lugar de ayudarnos mutuamente... Todo lo que hicimos fue pelear. ¿Es por eso que él está enfermo?

Si conoces otras frases, diálogos o monólogos que destacar de la película Minari (Lee Isaac Chung) deja tu comentario ;)