Fanny y Alexander (Ingmar Bergman)

Frases y Diálogos de la película "Fanny y Alexander" (Ingmar Bergman)


Aron: Todo está vivo, y todo es Dios y los pensamientos de Dios. No sólo las cosas buenas, las más crueles también. ¿Qué piensas?
Alexander: Si hay un Dios, entonces es una mierda, y me gustaría darle una patada en el culo. 
Aron: Tu teoría es muy interesante y parece estar justificada.

Obispo: Alexander, mi muchacho. Recuerda que los dos tuvimos una importante conversación hace un año, relativa a cuestiones morales.
Alexander: No fue exactamente una conversación.
Obispo: ¿Qué quieres decir?
Alexander: El obispo habló y Alexander no dijo nada. Y se sintió avergonzado, quizás, debido a sus mentiras. Me he vuelto más sabio desde entonces.
Obispo: Querrás decir que mientes mejor.
Alexander: Más o menos. 

Obispo: Eres un chico mayor ahora. Así que te hablaré de hombre a hombre. Puedes decirme… puedes explicarme… ¿qué es una mentira y qué es una verdad? Quizás creas que es una pregunta estúpida… Sólo bromeaba contigo. Por supuesto que sabes lo que es una mentira y una verdad, ¿no?
Alexander: (Asiente)
Obispo: Espléndido, mi muchacho. Estoy satisfecho. También sabes por qué alguien miente. ¿Por qué alguien miente? ¿Por qué uno miente? ¿Puedes explicármelo?
Alexander: Porque no quieres decir la verdad.
Obispo: Una respuesta astuta, amiguito. Pero no será tan fácil para ti. Te pregunté, ¿por qué alguien no dice la verdad?
Alexander: No lo sé.
Obispo: Tenemos mucho tiempo, Alexander. Y estoy muy interesado en tu respuesta. Así que podría esperar todo lo necesario. Quizás no lo creas, pero es cierto.
Alexander: Uno miente para tener una ventaja.
Obispo: Buena respuesta, muchacho. Buena y concisa. 

- A la cama niños. Ahora digan sus oraciones.

- Gracias Dios por este día. Por favor, hazme un niño bueno. Haz que tu ángel permanezca conmigo durante la noche. Dios bendiga a papá y a mamá, al abuelo y la abuela, a mí, a mis hermanos y hermanas, y primos, tías y tíos. Vega, Ester, Maj, Siri, Berta, Alida, Lisen y el tío Isak y todos los demás. Amén. 

Ismael (a Alexander): Tienes pensamientos tan terribles… es casi doloroso estar cerca de ti. Aunque también es tentador. 

Helena Ekdahl: ¿Estás triste porque has envejecido?

Isak Jacobi: Ciertamente no lo estoy. Todo está empeorando. Peores personas, peores máquinas, peores guerras… y peor clima. Me alegro de que pronto estaré muerto.

Gustav Adolf Ekdahl: El mundo es una cueva de ladrones y la noche está cayendo. El mal rompe sus cadenas y corre a través del mundo como un perro rabioso. 


Gustav Adolf Ekdahl: Por lo tanto, seamos felices mientras estamos contentos. Vamos a ser amables, generosos, cariñosos y buenos. Es necesario y no del todo vergonzoso para disfrutar en el pequeño mundo.

Abuela (leyendo a August Strindberg): “Cualquier cosa puede pasar. Todo es posible y probable. El tiempo y el espacio no existen. Sobre la frágil base de la realidad la imaginación teje su tela y diseña nuevas formas, nuevos destinos”.




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